Prehispánicos

PREHISPÁNICOS

El paso de los Españoles a Tenochtitlán

Después de la matanza de Cholula, los españoles siguieron rumbo a la capital azteca. «…al cruzar entre los volcanes pudieron admirar el gran lago en donde destacaba como una esmeralda la isla de Cuitláhuac, bella antesala de la deslumbrante México-Tenochtitlán».

Y otro día por la mañana -señala Bernal Díaz- llegamos a la calzada ancha y vamos camino de Iztapalapa. Y desde que vimos tantas ciudades y villas pobladas en el agua, y en tierra otras grandes poblazones, y aquella calzada tan derecha y por nivel como iba México, nos quedamos admirados y decíamos que parecía a las cosas de encantamiento…»

Entonces es que aparece «tachado» en el escrito original de la historia del cronista soldado, lo siguiente: «…e fuimos a dormir a otro pueblo que se dice Mezquique [Mizquic] que después se puso nombre Venezuela y tenía tantas torres y grandes pues que blanqueaban, y el cacique de él y principales nos hicieron mucha honra… » «…pues desde que llegamos cerca de Iztapalapa -continúa Bernal- ver la grandeza de otros caciques que nos salieron a recibir que fue el señor de aquel pueblo que se decía Coadlabaca [Cuitláhuac] y el señor de Culhuacán, que entre ambos eran deudos muy cercanos de Moctezuma…»

Señala por su parte Fray Francisco de Aguilar, en su relación de la conquista de la Nueva España, que: «entraron a Cuitláhuac los españoles y demás acompañantes, muy sorprendidos al contemplar la belleza de la ciudad con sus grandes torres, iban por una angosta calzada en la que apenas podían pasar dos en caballo toda era de puentes elevadizos…»